Carol

He comprado una poción mágica que curará todos tus problemas cuando no sonrias, tengo un armario lleno de tiritas de tu color favorito para tapar cualquier cosita que no te guste, en un cajón que llega hasta el infinito están todos los besos que me quedan para ti y en otro un poco más arriba un montón de globos con todos los momentos que hemos vivido juntas. Aquí siempre tendrás un rincón calentito, una ventana grande para que miremos las nubes volar, el sol, todo el camino que ya nadie podrá quitarnos. A la derecha un papel grande y lápices de colores para poder dibujar todos nuestros sueños. En aquella librería están colocados  los libros que me recuerdan un poquito a ti, la película del Viaje de Carol, las fotos, las canciones y en una de mis cajas de colores los recuerdos. Y allí arriba al lado de los cojines la Blandita. También tengo mi cuaderno pequeño en el que aparece tu nombre en cada una de las páginas, tus dibujos y la bruja que después de tantos años, me sigue dando miedo, pero solo cuando no estás. Todas las velas están perfectamente colocadas para cuando llegues y quieras encender una o te apetezca miralas, como cuando nos miramos nosotras y no decimos nada. Huelen bien, como mi bolita amarilla, esa que tanto te gustaba cuando eramos pequeñas. Y tranquila, no he olvidado las postales, piolín y tus frases en la pizarra, todo sigue como lo dejaste. Creo que he elegido el jersey que más te gustará de todos los que tengo para que te lo pongas cuando tengas que enfrentarte a algo y yo no pueda estar contigo, a conjunto de mis pañuelos, que también son tuyos y al lado mis ganas de que todo salga como te mereces. Yo me he comprado otro, con las mangas muy largas, para que pueda darte un abrazo aunque no estemos cerca. Te espero en este huequecito que tanto se parece a mi corazón para que juntas, podamos comer las palomitas de la abuela, porque no les hace falta un poquito de sal, les hace falta un muchito de Carol, como a mi todos los días que no puedo verte. No olvides que aquí solo estaremos nosotras, los duendes y algun hada y que con ayuda de ellos no permitiremos que nadie te haga ni una sola herida, por muy pequeña que sea. Aquí me tienes wasi, para siempre.